México acaba de hacer el pasaporte ridículamente fácil en 2025

A principios de noviembre de 2025 la Secretaría de Relaciones Exteriores activó sin bombo ni platillo el cambio más grande al trámite de pasaporte en veinte años. Ya no necesitas cita para renovar si tu último pasaporte fue expedido después de 2019 y está vencido hace menos de cinco años. Llegas, pagas, te toman foto y huellas y sales con el nuevo documento en la mano. Así de literal. En varias delegaciones lo están haciendo en menos de veinte minutos.
El segundo cambio es todavía más absurdo de tan simple: las fotografías ya no las llevas tú. Todas las oficinas grandes instalaron cabinas biométricas nuevas que toman la foto, recortan el fondo y ajustan tamaño automáticamente. El funcionario solo verifica que parpadees y ya. Se acabaron las vueltas al estudio fotográfico y las devoluciones por “brillo en la frente” o “cejas tapadas”. La máquina no se queja y la foto sale perfecta a la primera.

El último detalle que nadie esperaba: varias delegaciones empezaron a entregar el mismo día los pasaportes de diez años si llegas antes de las once de la mañana y hay libretas en almacén. Ya no hay excusa de “se nos acabaron”. El gobierno federal surtió a las oficinas principales con meses de anticipación y la instrucción interna es clara: entregar en el momento siempre que sea posible. México, el país que todos asociábamos con filas eternas, acaba de convertir el trámite más odiado en algo más rápido que renovar la licencia en Texas. Quien lo diría.